martes, 29 de mayo de 2012

Perspectivas y simplificaciones

Las cosas son como son y no de otra manera. Y caminas, con toda tu razón y toda tu lógica colgada a la espalda, con todo el peso que tú misma has ido acumulando y con la seguridad de que no hay otra manera de ver las cosas. Vas rumiando, hurgando en la herida, sintiendo que no hay opciones, que es lo que toca, que la única realidad posible es la que tus ojos pueden ver y no hay nada más. Segura de que tu corazón necesita tiritas y un poco de agua oxigenada.
Y llegas, y sin prever argumentos en contra lo cuentas, lo pones encima de la mesa y esperas el consuelo, la palmadita en la espalda, pobre chica, cuánta razón tienes, qué putada, entiendo tu pesar... Pero no, digamos que tu amigo sonríe, hilvana un par de historias de conocidos, simplifica, anula la grandeza de tu drama y vuelve a sonreír.

Es la importancia de las perspectivas. Que no hay nada como prestar tu tristeza y tu desasosiego, tu decepción. Se lo pasas a un amigo y te lo devuelve convertido en anécdota, en ejemplo redondo: anda chica, eso es una auténtica gilipollez.

Nota mental: comparte tus decepciones y simplifica la perspectiva, todo pesa un poco menos.

1 comentario:

  1. Hombre, pues si, o no...depende de la importancia que tenga la cosa, que tampoco nos hagan creer que algo es menos serio de lo que pensamos y dejemos la preocupación de lado, que si necesitamos tiritas por algo será...

    Como siempre, habría que ver cada caso. Y cambiando de tema, felicidades por el blog! Aquí me tienes de nuevo siguiendote :)

    Bea

    ResponderEliminar